Guías

Gestionar las obligaciones fiscales puede ser un desafío tanto para autónomos como para empresas. Afortunadamente, existe la posibilidad de aplazar o fraccionar algunos impuestos, lo que te permitirá manejar tu liquidez de manera más efectiva

Ahorrar dinero puede parecer un desafío insuperable, especialmente cuando se tiene un ingreso bajo. Sin embargo, es posible con un poco de disciplina, estrategia y algunos sacrificios menores. A menudo, son las pequeñas cosas las que se acumulan y marcan una gran diferencia con el tiempo.

Hoy quiero compartir con ustedes algunas cosas prácticas que hubiese querido saber al comenzar mi propio negocio.

¿Sabías que puedes emprender tu negocio utilizando de golpe todo el dinero que te corresponde de prestación por desempleo? Esto es lo que se conoce como capitalización del paro, una herramienta diseñada para facilitar tu aventura empresarial.

¿Es posible adquirir una propiedad sin tener dinero ahorrado? ¡La respuesta es sí! Aunque suene increíble, con la estrategia adecuada, puedes lograrlo. En este artículo, te guiaré, paso a paso, utilizando una metodología ya probada que te permitirá alcanzar este objetivo.

Montar un negocio es como embarcarse en una montaña rusa: hay altibajos, momentos de velocidad y otros de pausa, y una gran incertidumbre sobre qué viene a continuación. Sin embargo, una de las preocupaciones más extendidas entre los emprendedores es cómo ponerse un sueldo, especialmente cuando el negocio está en sus primeras etapas y los ingresos son inestables.

Tomarte unas vacaciones y desconectar completamente de tus responsabilidades como autónomo puede parecer una misión imposible. Queremos darte un respiro explicándote en detalle cómo los días de cortesía, también conocidos como vacaciones fiscales, pueden ayudarte a disfrutar de tu merecido descanso sin preocuparte por notificaciones de Hacienda y los impuestos. Empezamos.